Cómo Ayudar a Crecer Su Familia

“Desde que ... he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies unos a otros. Te he dado un ejemplo a seguir. Haz lo que yo he hecho con vosotros” (Juan 13: 14-15 NTV, segunda edición).

Si una de las marcas de una familia increíble es que ayudemos mutuamente a crecer, ¿cómo se hace eso?

Déjeme darle dos formas de cómo ayudar a crecer su familia y dos maneras que no lo hacen. Esto se aplica en todas las áreas de la vida.

Ayudarse mutuamente a crecer:

A través del ejemplo. Jesús hizo esto en la enseñanza de los discípulos. Juan 13: 14-15 dice, “... Desde que he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies unos a otros. Te he dado un ejemplo a seguir. Haz lo que yo he hecho con vosotros” (NTV, segunda edición). Sus hijos no quieren oír un sermón. Ellos quieren ver el ejemplo de Jesús en su vida.
A través de conversaciones. Si usted no está teniendo conversaciones críticas con sus hijos sobre problemas reales, no están creciendo. Por desgracia, la mayoría de las conversaciones que tenemos con los niños son sobre el horario, la alimentación, o la tarea y no por las cosas que realmente importa en la vida.

La Biblia dice en Deuteronomio 6: 7, “Usted debe enseñar a los mandamientos de Dios [] a sus hijos y hablar de ellos cuando se está en casa o salir a dar un paseo; al acostarse y la primera hora de la mañana” (TLB).

Ahora déjeme decirle dos maneras que no trabajan para ayudar a las familias a crecer:

A través de la crítica. Acuciante no funciona. Condenando no funciona. Criticar y quejarse son totalmente ineficaces para ayudar a una persona a cambiar. ¿Por qué? Porque cuando usted critica, usted está centrado en lo que no quiere en lugar de lo que usted desea. Efesios 6: 4 dice: “No seguir regaños y molesta a sus hijos, por lo que enojado y resentido. Más bien, criarlos con la disciplina amorosa aprueba el Señor mismo, con sugerencias y consejos según Dios “.
A través de la comparación. Todo el mundo es único. No hay nadie en el mundo como tú! Es por eso que la comparación nunca, nunca funciona. De hecho, es letal para cualquier relación. La Biblia dice: “Cada persona debe juzgar sus propias acciones y no se compara a sí mismo con los demás. Entonces él puede estar orgulloso de lo que él mismo ha hecho” (Gálatas 6: 4 NVI).

Hablar de ello

Piense en las conversaciones que tiene con su familia ayer u hoy. Estaban hablando cosas que realmente importa en la vida?
¿Qué fue lo último que corrigió en sus hijos? ¿Cómo estás siendo un ejemplo diario de la forma correcta de vivir en lugar que el comportamiento incorrecto?
En lugar de comparar o criticar, ¿cómo se puede acumular las personas en su familia?